Nutridos de descanso absoluto y cultural y de vuelta ya en Madrid, no podemos por más que dejarnos caer por uno de los restaurantes que desde su apertura nos tiene robados el corazón. Se trata de Navaja, un diminuto y bullicioso restaurante cuyas coordenadas nos llevan hasta la calle Valverde y donde sus propietarios Libia y Álex nos reciben con la mejor de las sonrisas. Un torbellino gastronómico en el que Galicia confraterniza con Perú, estando Malasaña de testiga, ofreciéndonos un viaje atrevido e inolvidable por los sabores más de siempre. Un garito que supera cualquier tipo de expectativa cuando empezamos a degustar sus ricas opciones culinarias con las que alcanzamos un orgasmo de los buenos. No te vayas sin probar las navajas Nikkei, su aguachile de gambón, sus ostras da Pedra o sus buns de presa ibérica y ¡atención!, el de cangrejo (en la foto)… ¿Existe algo más rico? Lloramos de gusto con tan solo recordarlo en boca. Mucho más que un local de moda que no admite reserva pero que debes anotar el primero en tu lista foodie. Aviso: es adictivo.
C/ Valverde, 42.
Horario: M-J: 19,00h. a 02,00h. y V-D: 13,00h. a 02,30h.